TrinaTracker (Trina Solar) ha obtenido la certificación de carbon footprint para su planta de fabricación situada en Viana (Navarra). Este importante reconocimiento, otorgado por Bureau Veritas, subraya el compromiso de TrinaTracker con la protección ambiental y su contribución a un futuro sostenible.
La evaluación de la carbon footprint se llevó a cabo siguiendo el protocolo GHG, una metodología universalmente reconocida para la contabilización del carbono. Se analizaron las emisiones de alcance 1 y 2, confirmando la precisión de los informes de TrinaTracker. Además, se está llevando a cabo una evaluación adicional para verificar las emisiones de alcance 3, con la expectativa de recibir otra certificación a finales de año.
La empresa se propone reducir a la mitad la intensidad de las emisiones de gases de efecto invernadero de sus productos fotovoltaicos de Categoría 1 y 2 para el próximo año en comparación con los niveles de 2020. TrinaTracker, que ya posee las certificaciones ISO 9001, 14001 y 45001, está trabajando ahora para obtener la ISO 14064, que confirmará la cuantificación y el reporte de las emisiones y la reducción de gases de efecto invernadero en conformidad con las normas internacionales.
A largo plazo, Trinasolar ha planificado varios proyectos de ahorro energético con el objetivo de reducir el consumo energético global en 1.000 millones de kWh entre 2021 y 2030.
Álvaro Guerra, responsable de la planta de Viana, declaró: «Estamos muy orgullosos de haber obtenido la certificación de carbon footprint de Bureau Veritas. Nuestro enfoque para alcanzar los objetivos ecológicos y realizar una producción sostenible está arraigado en la cultura de nuestra empresa: apuntamos constantemente a mejorar e innovar en estas áreas, y consideramos esta certificación como un poderoso reconocimiento de nuestro trabajo hasta la fecha».