Solaria ha cerrado los nueve primeros meses de 2025 con unos resultados extraordinarios, consolidando un ejercicio marcado por un fuerte crecimiento operativo, un avance acelerado en su pipeline y un rendimiento financiero muy por encima de previsiones. La compañía prevé superar su objetivo anual de Ebitda gracias a la entrada en operación de nuevas plantas, la expansión internacional y el impulso de nuevas líneas de negocio.
Durante los nueve primeros meses del año, Solaria ha alcanzado unos ingresos de 258,9 millones de euros, un 65 % más que en el mismo periodo de 2024. El Ebitda crece un 75 % hasta los 230,7 millones de euros, situando a la empresa en una posición sólida para superar su guía anual de 250 millones. El beneficio neto se eleva hasta los 141,7 millones de euros, un incremento del 148 %, impulsado por la optimización financiera y la entrada en operación de nuevas instalaciones fotovoltaicas.
La compañía mantiene una estructura financiera estable, con una deuda neta de 1.316 millones de euros —equivalente a 4,5 veces el Ebitda de los últimos doce meses— y un flujo de caja operativo positivo. Además, continúa con su plan de recompra de autocartera, que aspira a alcanzar el 10 % del capital social y que ya representa el 2,85 %, reafirmando la confianza del consejo en la evolución del valor corporativo.
En el ámbito operativo, Solaria avanza hacia los 3 GW instalados a cierre de 2025, con un total de 4,4 GW en operación y construcción. Entre los principales hitos destacan la progresión de proyectos emblemáticos como Garoña (710 MW), Cataluña (200 MW), Peralveche (150 MW) y Tucana (45 MW). La compañía ha conectado además su primera batería hibridada en España, fortaleciendo su estrategia en almacenamiento energético y abriendo camino a nuevos modelos híbridos solar-batería.
La compañía también acelera en áreas tecnológicas emergentes como los centros de datos, donde busca integrar su capacidad renovable con la creciente demanda eléctrica asociada a la digitalización y a la inteligencia artificial. Esta diversificación estratégica se alinea con su objetivo de posicionarse como un operador energético y digital de referencia en Europa.
Arturo Díaz-Tejeiro Larrañaga, CEO de Solaria, subraya que estos resultados son “el fruto de una estrategia disciplinada: más generación, más eficiencia y una apuesta decidida por nuevos negocios como el almacenamiento y los centros de datos”. Añade que la compañía mantiene un crecimiento “sólido, sostenible y preparado para liderar la nueva ola de electrificación europea”.
Con más de dos décadas de trayectoria y una cartera diversificada, Solaria refuerza su rol como uno de los actores clave en energía solar, almacenamiento y servicios energéticos avanzados en Europa.




